CUENTO "LA CENICIENTA"

NARRADOR:
Érase una vez una joven huérfana que vivía con su
madrastra y sus dos hijas…
(Cenicienta
y las madrastras están en el salón al lado de la chimenea mandándole a
Cenicienta que ordene y limpie la casa)
HERMANASTRA 1 - Cenicienta que haces hay parada, date prisa que no sabes
ni limpiar. Lávame y plánchame la ropa.
HERMANASTRA 2 - ¡Cenicienta! También ve a buscar mi peine y hazme mis
maravillosas coletas.
HERMANASTRA 1 – Además cose los dobladillos de mi vestido.
HERMANASTRA 2 – Cenicienta recuerda que tienes que lavarme mi pelo con
camomila para después volver a hacerme mis coletas esta noche.
MADRASTRA – Cenicienta, tu harás todo lo que te piden pero antes
lavaras todo los platos que hay en la cocina, limpiaras el suelo , regaras las
plantas, sacaras toda la ceniza de la chimenea y no te olvides de limpiar
también toda la escalera y todas las ventanas.
(Llaman
a la puerta)
HIJASTRAS
A CORO – ¡Ve a abrir!
LECHERO - Buenos días, traigo leche y vengo a cobrar sin falta o sino no hay
mas leche.
(Cenicienta
se pone muy nerviosa y mira a sus hermanas)
HERMANASTRA 1 - ¿Quién es?
HERMANASTRA 2 – ¿Qué ocurre?
CENICIENTA – Es el lechero y quiere cobrar
MADRASTRA – Oh, ¡no!
HERMANASTRAS- Claro si no hubieras gastado el dinero en tantos
vestidos, ahora podríamos pagar la leche.
LECHERO –
Señorita si no me pagan no hay más leche
CENICIENTA – No, por favor necesitamos la leche. Yo no sé nada del
dinero, mira mis ropas esta toda ropa y sucia (sigue asustada)
HERMANASTRAS 1 – Cállate, siempre haces lo mismo
HERMANASTRA 2 – (mirando a Cenicienta de mal modo) ¿y ahora que
haremos?
MADRASTRA – Señor Lechero, Ud. Perdone, pero no sabíamos que esto
pasaría, te pagaremos lo antes posible
CENICIENTA – (dice que no con la cabeza mientras llora)
LECHERO – (mirando y pensando lo que hará). Bueno, siendo así avisare lo que
paso y volveré mañana. Pero eso sí, avisare al rey de lo que pasa en esta casa.
LAS HERMANASTRAS1 Y 2 - (A coro) ¡Oh, se enterará el Rey!
MADRASTRA – Da igual iremos
al baile y seguro que el príncipe viendo lo guapas que sois se querrá casar con
vosotras. Venga a prepararse.
CENICIENTA - (Se sienta a llorar al lado de la chimenea)-Yo nunca
podré asistir a un baile, ni tendré un vestido, ya que solo hago que limpiar
esta casa y esta chimenea, sacar ratones y limpiar calabazas.
(Aparece
la hala madrina)
HADA MADRINA - Cenicienta, Cenicienta…
CENICIENTA - ¿Quién eres?
HADA MADRINA –Soy tu hada madrina, ¡por favor deja de llorar!
CENICIENTA - (Sorprendida) ¡Hada Madrina! Qué suerte verte, pero no
puedo dejar de llorar porque mi situación es muy triste.
HADA MADRINA - ¿Por qué?
CENICIENTA - Mis hermanastras irán al baile en el palacio y se
vestirán muy guapas, sin embargo yo, nunca tendré un vestido para ir a una
fiesta así…
HADA MADRINA - ¿Por qué dices eso, cenicienta? Yo te demostraré que
con sólo tocar tu vestido, tú también podrás asistir al baile. Ahora lo veras.
(Acerca
la varita tocando a Cenicienta)
CENICIENTA - ¿De verdad?
HADA MADRINA – Sí, convertiré
tu sucia ropa en un bonito vestido, esta calabaza en una gran carroza y estos
ratones se convertirán en rápidos caballos que al palacio te llevaran. Pero
recuerda que a las 12 de la noche debes volver porque tu hechizo se romperá. Correé
NARRADOR: Mientras Cenicienta se preparaba para el baile, la fiesta
ya había comenzado. (Entran a escena las hermanastras y la madrastra)
Pregoneros en off - Atención, atención…El príncipe invita al gran baile a
todas las hermosas damas de esta ciudad… (Entra el príncipe y se pone canción
de trompeta)
(Las
hermanastras se ponen nerviosas cuando el príncipe pasa por delante de ellas)
(Vuelven
a sonar las trompetas y aparece Cenicienta por la puerta de atrás)
CENICIENTA - Oh, qué hermoso Palacio
PRÍNCIPE - (se acerca) ¡Bienvenida! Señorita, ¿Puedo bailar contigo?
CENICIENTA - Claro
(Comienzan
a bailar un vals y mirarse)
NARRADOR: El tiempo pasaba muy deprisa mientras Cenicienta y el
Príncipe bailaban. Pero el reloj sonó y las 12 son. (Diapositiva reloj y sonido
de campana)
CENICIENTA – lo siento, tengo que irme.
PRÍNCIPE
- Pero dime al menos ¿cómo te llamas?
(Cenicienta
sale corriendo por el pasillo y se le cae el zapato)
PRÍNCIPE – ¡Oh, ha perdido un zapato! ¡La encontraré!
NARRADOR:
El Príncipe estuvo toda la noche pensando en esa hermosa chica. Y decidió a la
mañana siguiente pasar por las casas para averiguar de quien era ese hermoso
zapato.
(Suena
el timbre)
MADRASTRA – (Le dice a Cenicienta) Ve a abrir.
CENICIENTA - Sí, claro.
(Entra
el príncipe a la casa con un almohadón y el zapato)
PRÍNCIPE – Señoritas si me permiten probaré el zapato una por una. ¿Quién
empieza?
MADRASTRA - Bueno niñas, será de esta casa de donde saldrá la
elegida. Oh, ¡Qué emoción! ¡En mi casa y con mis hijas! ¡Qué feliz que soy!
HERMANASTRA1 – ¡Príncipe, por favor yo soy la mayor, a mí me
corresponde y seguramente me calzará!...
PRÍNCIPE- (La mira a la cara, pone cara de duda) ¡Veremos!...
HERMANASTRA 1 – (Pero no entra, luego comienza a desesperar sigue
intentando hasta luchar con el zapato mientras todos la miran expectantes.
Finalmente se da por vencida exhausta). No, no entra (Llora) ¡Qué horror!
(Avanza
triunfante hermanastra 2)
HERMANASTRA 2 – Ahora, ha llegado mi turno. ¡A mí sí me entrara!
(Todos la miran. Calza e insiste pero no entra su pie. Desesperada arroja el
zapato enfadada, con desdén) ¡Qué zapato horroroso! Mi pie es muy delicado,
pero es mi zapato. Sólo que mi pie está hinchado.
PRÍNCIPE – Oh comprendo, bueno seguiré probando, adiós
(Desde
la puerta que abre Cenicienta; dice suavemente)
CENICIENTA – Perdón, Príncipe yo podría (señalando el zapato) probármelo…
(Dudando al mirar a sus hermanas) Digo yo.... ¿Podría?
MADRASTRA – Cenicienta, no molestes al Príncipe tú eres una simple una sirvienta,
retírate.
PRÍNCIPE – (Sensible) De ninguna manera, todos tienen derecho y
¿por qué no ella? ¡Sí, claro que sí! Ven que te lo pruebe. (Se acerca al centro
de la sala. Se enciende la luz.
Expectación. Saca el zapato y se lo alcanza a Cenicienta)
CENICIENTA – (Sumamente emocionada) -Yo- (se pone el zapato
cómodamente) ¡sí Príncipe ha entrado! (Mirando al Príncipe)
TODOS –
¡Oh, Oh, Oh!
PRÍNCIPE – Es maravilloso, ¡mi corazón me decía al escuchar su voz! (enamorado)
Hoy es un día maravilloso. El Príncipe ha encontrado a quién será su esposa.
CENICIENTA -(Sumamente
emocionada y casi sin poder creerlo) ¿Yo?......
NARRADOR
– (Mirando al Príncipe) ¡Atención por favor señores y señoras! El Príncipe
anuncia a toda la comarca que hoy ha encontrado a la dama que será su futura esposa.
Y esta noche se realizará el baile de Presentación.
NARRADOR: Asistieron todos las personas de la comarca y todos estaban
pendientes de Cenicienta y el príncipe. Y sonó la música y todos los asistentes
comenzaron a bailar. “Y colorín, colorado este cuento ha finalizado”.